El Eibar, equipo de segunda B entonces, eliminó al Athletic del torneo de copa.
Fue el último partido del torneo del KO jugado en San Mamés.
Arruabarrena, de penalty, nos elevó a los cielos.
Hubo mucha gente del Athletic que en el momento del pitido final se dieron cuenta de que era el último partido de Copa del Athletic en la vieja catedral, un club y un estadio históricamente unido a ese trofeo, vaya caras de poema que se vieron.